Con la inevitable
globalización, los mercados mundiales permanecen en contante interrelación,
esto ha influido directamente en las estrategias que deben diseñar las
organizaciones para participar en el mercado global. De allí que la calidad de
los procesos productivos y operativos son vitales para la expansión del
mercado, el posicionamiento y la permanencia en un espacio altamente
competitivo. Para ello se han establecido nuevas formas de gerencia, que mucho
tienen que ver con la necesidad de adaptar las organizaciones a las exigencias
de las nuevas formas de globalización empresarial.
En este
punto el tema de la comunicación es de suma importancia ya que significa la
base de la optimización de todos los procesos productivos, operativos y administrativos
de la empresa. En este plano, la imagen corporativa y el plan de comunicación empleado por la organización
hacen la diferencia en espacios como el mercadeo, el comercio, el estudio de la
competencia, la forma en que se llega hasta el cliente con un mensaje que
propicie la aceptación en el consumidor de una marca, producto o servicio.
A nivel interno, la comunicación
es un reflejo de la potenciación que puede obtenerse de un personal altamente
interrelacionado y de un mensaje totalmente claro, centrado en las metas
organizacionales y ajustado a un plan bien diseñado. De allí que la comunicación
organizacional no puede ser una opción o una herramienta, ni tampoco un proceso
interno, sino que es una parte fundamental de la productividad de la empresa y
de su óptimo funcionamiento, lo que influye en su desempeño integral.Por: Nazalia Valera
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